- La campaña de control en marcha en este 2021 en colaboración con la empresa Larus Control ya ha retirado 130 nidos de gaviotas (139 huevos y 45 gallinas) y capturado 238 ejemplares de palomas
- A pesar del cambio de actitud de las aves, que gozaron de una mayor libertad de movimiento con el descenso del tráfico, el servicio ha conseguido mantener el número de parejas de gaviotas en 100
Si bien la reducción del tráfico ha provocado algunos cambios en la actitud de las aves que viven en la ciudad, especialmente en lo que respecta a las palomas, que han gozado de una mayor libertad para moverse por el entorno urbano, las campañas de control de aves llevadas a cabo por la Concejalía de Sostenibilidad Desarrollo y Medio Natural consiguió que la pandemia Covid-19 no influyera negativamente en su propagación y / o traslado a otros puntos de Pontevedra. Así, el servicio realizado en colaboración con la firma especializada Larus Control no solo ha conseguido mantener estable el número de palomas y gaviotas respecto a 2019 y 2020, sino que también ha impedido la ampliación del territorio ocupado por estas aves.
En cuanto a las gaviotas, la campaña aún en marcha en este 2021, arrancada en primavera, se centró en la zona antigua y las principales avenidas de tráfico peatonal, el ensanche, Benito Corbal y Loureiro Crespo (donde hay un mayor número de denuncias). Durante este período se recibieron 150 denuncias, se atravesaron 263 techos y se retiraron 130 nidos, 139 huevos y 45 gallinas. Según el concejal de Desarrollo Sostenible, el socialista Iván Puentes, “la población de gaviotas se ha reducido drásticamente desde el inicio de las campañas de control en 2014, ya que ahora tenemos 100 parejas en la ciudad y hace ocho años estaban por encima de las 200”.
“El servicio – enfatiza Puentes – está demostrando así su eficacia, ya que no hay renovación de las colonias. Los pollos que tuvieron que ser trasladados a la colonia ya habían sido retirados hace cuatro años, y en consecuencia hay las mismas gaviotas de siempre, más viejas. Las gaviotas adultas son cada vez más pequeñas y tienen menos huevos. De hecho, tenemos 100 parejas registradas y solo retiramos 130 nidos, lo que demuestra que casi no hay nidos de reemplazo. Muchos incluso están poniendo uno o dos huevos en la primera puesta. Los estamos obligando a hacer un esfuerzo que reduce su capacidad de reproducción.
Al mismo tiempo, las gaviotas patiamarillas habían ido trasladando paulatinamente sus nidos desde la zona antigua, que era su lugar predilecto y donde se concentraban, a otros puntos de Benito Corbal, Loureiro Crespo y A Parda. Como explica Juan Fraga, responsable de Larus Control, “la pandemia tampoco influyó en eso y las gaviotas siguen en los mismos espacios, con la diferencia de que el núcleo inicial estaba más concentrado en el casco antiguo y ahora también se están abriendo hacia nueva zona, desplazando sus nidos o desapareciendo ”.
Para paliar los problemas que sufre la hostelería en el casco antiguo
En cuanto a la campaña de control de palomas, se centra en el entorno de la Ferrería y Plaza de España, zonas donde se ubica un buen número de hoteles con terrazas y, por tanto, donde se detectan más problemas. Hasta el 26 de agosto, el servicio realizado por Larus Control, al que la Concejalía de Desarrollo Sostenible ha destinado un presupuesto de unos 18.000 euros, ha retirado unas 238 palomas mediante la instalación de jaulas. El número de palomas también se ha estabilizado (el censo ronda los 150 ejemplares en las inmediaciones de la Ferrería) y la pandemia solo se podía notar un poco en su comportamiento, teniendo más libertad para moverse por la ciudad, pero no se movía, por lo que no hubo influencia real ”, dice Juan Fraga.
Así, el número de capturas sigue una evolución similar a la del año pasado, ya que en todo 2020 se sacaron 404 palomas de la zona vieja y se sacaron 111 nidos, 285 huevos y 44 gaviotas (se revisaron 227 techos). No obstante, el número de palomas capturadas se verá incrementado en los próximos meses para situarse en absoluta probabilidad en los del año pasado, ya que la campaña de control del Ayuntamiento se prolongará hasta octubre.
Iván Puentes se muestra muy satisfecho «con el grado de sensibilización y colaboración ciudadana que se ha conseguido gracias a estas campañas, haciendo que la gente, la gestión y las comunidades de vecinos llamen ya por inercia en mayo (coincidiendo con el inicio de las mismas)». “Es un servicio muy consolidado – dice el alcalde del PSOE – y la ciudadanía lo usa con normalidad. La gente de Pontevedra es tan consciente que Larus Control no necesita llamar a nadie. Ellos ya llaman ellos mismos a las comunidades de vecinos. Siempre hay alguien que se olvida, pero el 90% de las personas ya advierten en mayo que quitarán los nidos.
Los ejemplares de paloma capturados se trasladan a un centro especializado para su liberación en las zonas donde existan depredadores naturales, sacrificando a los que se encuentran enfermos (y por tanto suponen un riesgo para la salud y seguridad), según establece la normativa. Según la normativa de la Xunta de Galicia, los postes de gaviota retirados deben ser devueltos a sus hábitats naturales en zonas costeras como el Parque Nacional de las Islas Atlánticas.
Concello de Pontevedra
Jesús Iglesias www.pontevedra.gal
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